Gota 10
Llevo conmigo un diablo – no el demonio de Sócrates-, sino un diablejo que me tacha a veces lo que escribo, para escribir encima lo contrario de lo tachado; que a veces habla por mí y otras yo por él, cuando no hablamos los dos a la par, para decir en coro cosas distintas.
Juan de Mairena, sentencias, donaires, apuntes y recuerdos de un profesor apócrifo, 1936