Relato: Nunca hables con extraños
—Sabía que mi mamá se equivocaba, sabía que los fantasmas sí existen, porque tú eres un fantasma, ¿verdad?
—Algo parecido…
—¿Seguro que a mis papás les parecerá bien que me vaya contigo? No les gusta que hable con extraños.
—Al principio estarán tristes, pero donde vamos ya no sufrirás más, y eso les servirá de consuelo.
—¿Por qué llevas ese abrigo tan largo?
—Refresca por las noches.
—¿Y para qué es ese palo tan raro?
—Se llama guadaña.
Si te gusta este microrrelato también pueden interesarte:
Pingback: Bitacoras.com
Me gusta la ingenuidad de la víctima. Buen microrrelato. Saludos, Yolanda.
Lo último en el blog de Juancé: Consejo práctico para adquirir estilo al escribir
Muchas gracias por tus palabras, Juancé, las aprecio especialmente viniendo de un profesor de Lengua y Literatura.
Un saludo.
Pingback: Relato: Atrapado - Tinta al sol
Pingback: Relato: Tercer grado - Tinta al sol