Relato: Doble vida
Cuando me llamaba Laura, tenía bonitos vestidos, una gran casa y un coche rosa.
Cuando me llamaba Vanesa tenía un vestido, dos zapatos de distinto color, y ninguna ropa interior.
Cuando me llamaba Laura, vivía de rodeada de hermosas chicas como yo, así que tenía que esforzarme por conseguir cinco minutos de atención.
Cuando me llamaba Vanesa, no había otras como yo.
Cuando me llamaba Laura, vivía en la enorme habitación de Sara.
Cuando me llamaba Vanesa, vivía en un cuarto sin ventana con Saray, sus padres y su hermana mayor.
Cuando me llamaba Laura, tenía clase.
Cuando me llamaba Vanesa, recibía amor.
Bendita donación.
Si te gusta este relato también pueden interesarte:
Pingback: Bitacoras.com
¡Precioso! Con dos pinceladas lo dice todo: la vida es justamente así.¡Enhorabuena!
A ver esa novela, si podemos leerla pronto.
Lo último en el blog de Molina de Tirso: La abuela de todos (II)
Soy lenta como escritora, pero lo importante es que soy constante 😉
Me alegro mucho de que te haya gustado el microrrelato. Gracias por comentar y un saludo.
No iba por ahí. Como tú y yo sabemos, en literatura el tiempo no cuenta, nadie juzga el Quijote o La montaña mágica por lo que se tardó en escribirlas. Lo importante es el resultado.
Es que a mí me encantan los relatos pero el micro no suele gustarme. Lo considero un recurso cómodo al que le suele faltar un buen trozo. Pero en este caso las elipsis están muy bien hechas. Cuentas toda una historia compleja y le das al lector los elementos necesarios para completarla. Hay una parte que se deja a la imaginación de cada uno pero eso debe hacerse incluso en los relatos largos: la inteligencia del que lee tiene que ponerse en marcha.
Como me gustó tanto, pensé que estaría bien leer tu novela completa algún día. Sin más.
Y nada menos ¿eh? 😉
Lo último en el blog de Molina de Tirso: La abuela de todos (II)
No me lo había tomado como un juicio o una crítica, ni mucho menos 🙂
Me siento doblemente halagada porque te haya gusta mi relato cuando no te gustan los microrrelatos.
Muchas gracias por tus palabras.