Opinión: Mujercitas de Louise May Alcott (Edición Lumen)

Cuando a las escritoras se nos pregunta por las figuras que influyeron en nuestra decisión de escribir, suelen aparecer nombres como Virginia Wolf, George Eliot, Marguerite Duras, Charlotte Brontë, o Jane Austen, pero si escarbas un poquitín más te encuentras que, mucho antes de conocer a todas esas grandes autoras, hubo otra que despertó en nosotras el gusanillo de dedicarnos a esta profesión: Jo March, una autora que ni siquiera es tal, sino uno de los personajes protagonistas de Mujercitas.
Y es que, entre las escritoras, rara es la que, de niña, no soñó con ser como la independiente, valiente y talentosa Jo, a pesar de que entonces no sabíamos que no estábamos leyendo la obra original de Louise May Alcott, sino una versión reducida y edulcorada, que los editores pidieron a la autora al reeditar la obra, para que se ajustase mejor a la moralidad de la época.
Ahora he podido disfrutar de la versión íntegra de Mujercitas y su continuación Aquellas mujercitas, tal como la autora la publicó por primera vez, en el tomo que la editorial Lumen publicó en el año 2004.
En esta versión, los personajes ganan en profundidad y matices, se nos muestran mucho mejor sus contradicciones y defectos, y su evolución desde los prejuicios y egoísmos de la adolescencia hasta la madurez, que trae consigo cambios en sus prioridades. Dejan de ser arquetipos para convertirse en personajes tridimensionales con sus claroscuros, y el hecho de que sean más realistas, hace que la historia también resulte más realista.
Las tramas están también aquí más desarrolladas, e incluso uno de los puntos más conmovedores de la versión anterior, la muerte de Beth, gana en dramatismo y lirismo.
El único inconveniente que he encontrado en esta edición es que, a pesar de que sigue siendo el retrato de cinco mujeres fuertes, inteligentes y capaces (las cuatro hermanas y Marmee), hay más lugar para el machismo imperante en la época y el adoctrinamiento moral, como en la descripción de las dificultades matrimoniales de Meg, aunque esta sensación también puede deberse a que una es más susceptible a estos temas a los 39 que a los 9 años.
En resumen, una lectura absolutamente recomendable para todas las que alguna vez disfrutaron con la lectura de Mujercitas, e imprescindible para las que debemos a Jo buena parte de nuestra decisión de ser escritoras.
Si te gusta esta reseña también pueden interesarte:
Pingback: Bitacoras.com
Sí, yo también acabo de leerla en su versión completa ye stoy de acuerdo que personajes y trama ganan profundidad. Y por supuesto, siempre he querido ser como Jo. Saludos!
Lo último en el blog de Carla Paola Reyes: Cara o cruz (poesía)
Casi todas hemos querido ser Jo, creo que es uno de los personajes que más ha influido a las escritoras de todo el mundo.
Un saludo y muchas gracias por tu comentario.